Canal: falta algo más que agua.
Canal: falta algo más que agua. Orlando Acosta Patiño. Huber Humphrey Fellow. Enero de 2015.
Las consecuencias del fenómeno cíclico del niño ha puesto en evidencia no solo la vulnerabilidad de estructuras hidráulicas como el Canal de Panamá, sino los sistemas políticos administrativos - no por solo la falta del recurso- sino por la ausencia de una política integral en la dimensión de la planificación. Esta mirada podría apoyar a enfrentar y mitigar los problemas que se genera el choque entre lo social y lo territorial.
Fuentes del Canal de Panamá ha anunciado que los embalses del Canal están por debajo de los cuatro pies de los niveles usuales. También dicho en foros públicos (Fulbright Speakers Series, Ciudad del Saber, 2015) que el Canal de Panamá registra este año, como el año más seco en cien años de registros hidrometeorológicos. También quedó dicho en ese foro, que Panamá se encuentra lejos de una política administrativa- coherente e integral- de sus recursos hídricos. No existen en Panamá, a excepción de los lagos -Gatún y Alajuela- estructuras hidráulicas que sirvan para la administración del abundante recurso hidrico que fluye por los cauces de los ríos. Panamá es uno de los tres países del mundo con mayor abundancia de agua que cae del cielo, una oferta que no es administrada bajo ningún enfoque racional. Según opinión de expertos, Panamá debería contar con un instituto de hidrometeorología, tal y como tienen otros países del mundo.
Los embalses del Canal de Panamá sirven para posibilitar el tránsito de barcos por la vía, así como abastecer de agua a un poco más de la mitad de la población del país asentada en la gran región metropolitana. Hoy día se extraen de los lagos Gatún y Alajuela 415 millones de galones diarios. Proyecciones de la Autoridad del Canal de Panamá apuntan a que en 2025 habrá un desfase entre la demanda y la producción de agua, debido al crecimiento de la población y al mal uso del recurso y, que, incluso, en el 2012 ya se rebasó la proyección de consumo de agua establecida en 362 millones de galones diarios.
Ante la crisis de abastecimiento de las fuentes superficiales existentes, la débil administración de la red de abastecimiento del IDAAN con la frágil política de cobros-como la gran cantidad de agua que se pierde en tuberías rotas- el asunto del agua se hace crítico. El IDAAN anunció un proyecto de construcción de tres nuevas potabilizadoras la cuales utilizarían mucha más agua de la que se pensaba- entre ellas se estarían extrayendo 190 millones de galones diarios-, lo cual representa un 46% adicional de lo que se extraen de los embalses del Canal.
La incoherente política de vivienda- si es que existe- sigue empujando los límites de la ciudad más allá de lo racional sin aprovechar los recursos de redes y el potencial que ofrece la ciudad como escenario de construcción social. Hoy la ciudad de Panamá se extiende sobre cerca de 70 Km desde Pacora hasta La Chorrera. Las soluciones de vivienda que promueve el MIVIOT siguen generando concentraciones mayores al oeste de la provincia de Panamá con una falta de dotación del servicio de agua potable –como si el IDAAN y el MIVIOT existieran en dimensiones sideralmente distintas- dejando el problema del agua “a otras instituciones”. Pareciera que existe una absoluta descoordinación de los entes gubernamentales dedicados a los temas de planificación de asentamientos y el los recursos hídricos. El Ejecutivo que debería promover y propiciar esta coordinación que parece estar en “bosnia” y dejar de invocar a lo Divino para no dejar en manos de desarrollistas, los temas vitales de política pública: la ciudad, el recurso agua y el Canal.
