La Universidad de Oregon, el Ferrocarril y los forajidos comedores de sandia.



Hace un par de años viví por ocho semanas en la ciudad de Eugene en Oregon. Oregon es uno de los más grandes estados del Oeste de los Estados Unidos y se le conoce por su fantástica belleza natural y por sus maravillosos paisajes. La costa oeste del estado de Oregon parece haber salido de una mente imaginativa donde el límite es la belleza y la generosidad de una naturaleza desbordante.

En Eugene se encuentra desde el ano de 1876 la sede de la Universidad de Oregon. Es el primer centro universitario organizado en el Oeste de los Estados Unidos. Bordea a la ciudad de Eugene el río Willamete, cuyas riberas fueron declaradas por decisiones de cabildos urbanos, como patrimonio de la ciudad y su uso público es de carácter mandatario y de cumplimiento obligatorio. En contraste con nuestra ciudad, las riberas del río jamás serán vendidas y urbanizadas para el lucro particular.

Recién llegué a Eugene me llamó la atención las razones por la cual la Universidad de Oregon fue erigida en ese sitio: un valle en el medio de la nada rodeada de bosques de coníferas y un caudaloso río. A principio entendí que la ciudad había crecido con base a la explotación de los recursos naturales: minería y bosques. Más tarde entendí la complejidad de las relaciones y la inexorable relación de Eugene con Panamá, la ruta de tránsito y el ferrocarril.

El ferrocarril de Panamá fue abierto en el año de 1855 cuando se inaugura la ruta por el istmo de Panamá. Ese mismo ano se funda la ciudad de Colón como punto terminal. Coincide el ferrocarril con el inusitado descubrimiento de las minas de oro de California en 1848. Hit the mother and get a railroad ticket through Panamá….!!!.El viaje desde el este al oeste de los Estados Unidos era un largo y peligroso trayecto. La ruta de Panamá ahorraba a los forty niners o a forajidos comedores de sandias, miles de millas, meses de vicisitudes y por supuesto no un menos convulsionado trayecto.

El oro de California tocó los bancos del río Willamette y Eugene se transformó, movida por los dineros generados por el oro, y sin saberlo por el ferrocarril mas tarde, en una de las ciudades más importantes de del Pacific Northwest. Eugene sirvió como ciudad que concentraba bienes y servicios para el hinterland de la tierra prometida: centro álgido del convulsionado noroeste norteamericano.

William Aspinwall fue uno de los principales promotores y accionista del Ferrocarril de Panamá, quien al igual que Henry Villard, amasó extraordinarias fortunas por los beneficios generados por la industria del caballo de oro. Henry Villard, inmigrante alemán, filántropo fue el presidente de la Pacific Northwest, empresa que completo el ferrocarril desde Chicago hasta Oregon y quien salva de la bancarrota la Universidad de Oregon, donando de su fortuna personal, una importante suma, que determina y de allí en adelante el futuro y destino de la Universidad. Curiosa relación entre la academia y tecnología.

Desde muy lejos y tal vez sin medir consecuencias está William Aspinwall quien fue importante no solo para la construcción del ferrocarril transístmico de Panamá, sino que también por la responsabilidad en el manejo de parte del enorme flujo de correspondencia surgido por la gran cantidad de emigrantes que se desplazaron del este al oeste de los Estados Unidos. La línea Panamá-Oregon concesionada a William Aspinwall no solo hizo posible la llegada de las noticias desde Nueva York a San Francisco, pero muy probablemente al despegue y florecimiento de una de las ciudades hoy más interesantes del Pacifico Oeste: Eugene.

6 de agosto de 2007.

P.S. El interés personal en conocer los orígenes y fundadores de Eugene en Oregon me llevó a visitar los cementerios de la ciudad. Allí encontré simbología asociada a la Masonería, grupo de avanzada que forjó el destino de Eugene y de otras ciudades norteamericanas. Encontré muy pocas referencias judeo-cristianas.

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