Metro de Panamá: políticas de urbanismo y movilidad.
Metro de Panamá: políticas de urbanismo
y movilidad. Orlando Acosta Patiño. Octubre de
2015
Información
proveniente del diagnóstico de la región metropolitana del Pacífico panameño,
proyecto promovido por la Alcaldía bajo el alcance de una iniciativa de
cooperación bajo Ciudades Emergentes del BID, reveló que ciudad de Panamá es de
las urbes a nivel de América Latina con los más altos valores de emisiones de
gases invernadero. Esta información se
presentó en talleres que convocara- en septiembre pasado- la Dirección de
Planificación del Municipio de Panamá.
El
funcionamiento del hub de las Américas en el aeropuerto aporta altos tonelajes
de emisiones de gases invernadero proveniente de los aviones que llegan y salen
de Tocumen. Lo que sí es cierto es que el aeropuerto se expande más y más para
atender la creciente demanda de vuelos. . Ya Tocumen S. A. anunció el viaje más largo
–de 17 horas- hasta Dubai y se alistan en fila, las aerolíneas turcas, alemanas y las de la bolita del mundo, amén, para volar y operar desde Panamá.
El
otro segmento importante que aporta a las emisiones totales y al calentamiento global, son aquellas provenientes
del transporte privado. Estas tienen como fuente, los motores de los automóviles utilizados para el transporte privado. Información pública informó que el comercio automotriz ha
comercializado – hasta el mes de agosto- unos 40,917 automóviles nuevos, lo que
indica un ritmo de crecimiento sostenido de este negocio. La política de importación de vehículos va de
contramano con la las iniciativas que promueven la modalidad colectiva que
impulsa la inversión del Metro como alternativa de transporte. El gobierno bajo la Secretaría del Metro ya
inició la construcción de la línea 2 y se planifica la 3 hacia el sector oeste,
la cual incluye un nuevo puente sobre el Canal por el lado del Pacífico.
Con
relación a las iniciativas para incentivar el uso del Metro, los Municipios de Panamá y San Miguelito no
han sido capaces - a más de un año de
inaugurada la línea 1- promover estacionamientos para incentivar su uso. No existen estacionamientos públicos en las
terminales el Metro de Albrook, San Miguelito y San Isidro para dejar los autos
y usar el Metro. Con relación a las aceras de acceso, la
mayoría son un desastre en contraste con los amplios accesos que dejó el
Metro. Ni la ciudad ni el MOP ha sido
capaz de establecer un puente entre las aceras de las calles de Panamá y el
Metro.
La
Caja de Ahorros promueve por televisión préstamos para la compra de automóviles
y acentuar la solución privada de transporte.
Esto va
de la mano con la publicidad de los promotores de vivienda -que a nivel del
mensaje de venta- anuncia la solución de
vivienda, con auto incluido. El
Ministerio de Vivienda y Ordenamiento Territorial (Miviot) promueve y construye
para las ciudades de Panamá y Colón proyectos de vivienda fuera de los cascos
urbanos de las ciudades terminales. El proyecto de Renovación de Colón propone
5,000 soluciones de vivienda en Los Lagos, ignorando la oferta de servicios e
infraestructura existentes en la Isla Manzanillo. En el sector Pacífico con Techos de Esperanza
sigue expulsando a gentes a los proyectos sociales en el sector de Arraiján y
la Chorrera. No hay proyectos promovidos
desde el Miviot para los cascos urbanos de las ciudades de Panamá o Colón. La isla Manzanillo en Colón y la Exposición
en Panamá ofertan la más completa red de infraestructura, servicios y conectividad, pero están y se
quieren vacías. Tampoco se ofertan viviendas –accesibles en
precio- a lo largo del eje de la Domingo Díaz donde se construye la segunda
línea del Metro. Los nuevos proyectos de vivienda desde el Miviot obligarán a
los ciudadanas a salir de Colón o bien cruzar el Canal de Panamá por los saturados
puentes de Las Américas y Centenario en
automóviles privados financiados por la Caja de Ahorro añadiendo más toneladas
de gases a la atmósfera. Acá hay contradicciones profundas en todo el
esquema de políticas públicas que proclama la administración de gobierno. Las acciones están en completa riña con los objetivos ambientales,
funcionales y urbanos que persigue modificar el perfil urbano y ambiental del
gran espacio metropolitano del Pacifico en Panamá. Las políticas de desarrollo sectoriales y las inversiones públicas y privadas están siendo formuladas y ejecutadas de manera
contradictoria y parecieran atender intereses particulares del negocio de importación
de carros o construcción de casas que no van a satisfacer en el largo plazo el
beneficio de la colectividad del ciudadano y no colectivos. No se está produciendo sinergia entre las políticas
y acciones sectoriales para lograr
alcanzar objetivos de beneficio colectivo.
Queda entonces seguir haciendo un balance
objetivo y llamar la atención a la participación ciudadana y no a la sociedad
civil organizada- que ha demostrado que también atienden a intereses
particulares y no colectivos para la discusión de estos temas. Urge atender de
manera integral y de forma coherente lo urbano, lo ambiental y la
movilidad con una visión final de desarrollo
y sostenibilidad ambiental.