El movimiento moderno y su transformación en caliche
El movimiento moderno y su transformación en caliche. Orlando Acosta.
Diciembre de 2012.
El mes de diciembre de 2012 será recordado entre la
memoria de algunos como la fecha de la muerte de Oscar Niemeyer y quien le reconozco como uno de los imprescindibles
urbanistas del siglo XX. Niemeyer alcanzó los ciento cuatro años con un legado
universal para el desarrollo e historia del urbanismo y el movimiento moderno
en América Latina y el mundo.
Su ejecutoria se valora como clave para el desarrollo
del movimiento moderno bajo una fuerte influencia de notables como Le
Corbusier. Bajo su numerosa ejecutoria
destaca-entre muchos- el diseño de la
ciudad de Brasilia, proyecto bajo iniciativa del Presidente Kubischek; proyecto insignia del gobierno de este brasileño
que se empeñó en gobernar con los mejores.
La sede de las Naciones Unidas en Nueva York es parte de su obra,
edificios y complejos en las grandes ciudades del Brasil refleja la universalidad de su trabajo. El
legado de Niemeyer y se desparrama por todo el globo y
prácticamente sobre todas las ciudades.
El World
Monument Fund - organización de
conservación mundial- premió este año a un consorcio de arquitectos japoneses
por el esfuerzo de restauración de la escuela primaria de Hizuchi en la isla de
Shikoku en Japón. El edificio Hizuchi
fue reconocido por la organización DOCOMOMO en 1999 como uno de los edificios modernistas más
representativos en el Japón. Así el
legado del movimiento moderno se conserva en Japón y se proyecta sobre el contexto
planetario.
DOCOMOMO Internacional es una organización mundial que
tiene como misión observar la amenaza sobre edificios representativos del
movimiento moderno, el intercambio de ideas y tecnologías para su conservación, así como promover las ideas y
herencias del movimiento moderno. DOCOMOMO tiene un capitulo en Panamá con la
responsabilidad de exponer la importancia de los valores asociados al
movimiento modernista.
El edificio de la Caja de Seguro Social, Los Abanicos
en San Miguelito, la desparecida sucursal de la Caja de Ahorros en calle 17 y
Avenida Central y otros edificios son
ejemplos de la influencia de este movimiento.
El conjunto de edificios que integra la cuadra que comparte la antigua
Dirección General de Ingresos (DGI), en su momento las oficinas de Desarrollo
Social luego Ministerio de Salud, junto
al edificio de Hacienda y Tesoro son unos de los pocos conjuntos modernista en
la ciudad de Panamá que fueron construidos bajo la influencia de este
movimiento universal.
La noticia de la demolición del edificio de la antigua
DGI –parte de es conjunto- para la construcción de estacionamientos es una
decisión descabellada, insensible que se aleja en reconocer los valores universales que expresó el movimiento
moderno en ciudad de Panamá.
El desprecio no tendrá otra expresión como la que este
año 2012 revelará. Este año servirá para
recordar en Panamá la desaparición de Oscar Niemeyer así como ser testigos de
ver caer en escombros y caliche la expresión universal de éste movimiento en
Panamá.
Los ciudadanos, las universidades, profesionales, gremios,
asociaciones, los defensores del patrimonio,
estudiosos y organizaciones
tenemos una responsabilidad para hacer visible los valores universales de
nuestras ciudades y salir en su defensa.
El patrimonio de las ciudades y la conservación de sus valores universales es
una responsabilidad compartida.
Las autoridades de Gobierno bajo el argumento de resolver estacionamientos
públicos para los contribuyentes darán un ataque violento e irreversible a la memoria colectiva de los
panameños en un acto que solamente sumirá a nuestra sociedad en los oscuros
laberintos de la miseria de la espiritualidad de valores universales que en
otras latitudes se protegen con
responsabilidad y orgullo.
La desaparición del conjunto moderno entre Avenida
Perú y Cuba, entre las calles 35 y 36 se
transforma en un negocio de caliche travestida
en una agenda de interés política electoral, bajo el argumento de resolver espacio para
trenes de acero y neumáticos de goma.